Vivienda Calvo Sotelo-Chantada
Año 2012 | 142m²

Situado en la calle Calvo Sotelo, en pleno casco antiguo de Chantada, este inmueble fue construido en el año 1890 como parte de la arquitectura popular gallega, reflejo de una época y un modo de habitar vinculados a la funcionalidad y a la economía de recursos.

El edificio cuenta con una superficie de 40 m², una planta alargada y estrecha, y con dos salidas a la vía pública, lo que refuerza su conexión con el tejido urbano tradicional. Como respuesta al programa de necesidades, el proyecto propone una rehabilitación integral acompañada de una ampliación que permite mantener los usos originales: comercial en planta baja y residencial en las plantas superiores, fomentando así la recuperación activa del inmueble dentro del núcleo tradicional.

Los criterios compositivos adoptados en la ampliacaión para las fachadas se basan en la neutralidad y la sencillez, tanto en el tratamiento de los colores como en las texturas, con el objetivo de respetar el ambiente urbano existente y no introducir elementos discordantes. Su escala, proporción y materiales son coherentes con el entorno construido del casco antiguo.

Dado el valor estético del edificio y su pertenencia a un contexto con fuertes connotaciones históricas, se propone como pieza singular en la ampliación una galería cuadrada de madera, reinterpretando de forma contemporánea un elemento tradicional de la arquitectura gallega. Esta galería actúa como nexo entre pasado y presente, aportando luz, calidez y carácter a la vivienda sin alterar el equilibrio del conjunto.

Con esta intervención se busca poner en valor la arquitectura vernácula gallega mediante una actuación respetuosa y coherente, que no solo conserva, sino que actualiza y revitaliza una parte significativa del patrimonio construido de Chantada. Como pieza singular en la ampliación, se propone una galería cuadrada de madera, reinterpretada en clave contemporánea. Este elemento tradicional de la arquitectura gallega se transforma en un nexo entre pasado y presente, aportando luz, calidez y carácter a la vivienda sin alterar el equilibrio del conjunto.